12.05.2017

Día 339: Donde el llanto se silencia

Algo que escribí el 17 de Julio del 2017 y que ayer traje a colación una parte modificada en el escrito de Lucas Fulgi →  son las tres menos diez 

Este no es un poema,
es un vómito letrado que no puedo contener más.
Me consume desde adentro,
me devora toda la luz,
y yo gustosa me dejo conquistar por las lágrimas.
Debajo de la regadera, donde el llanto se silencia,
y el agua me invita a pensar
que la solución es no existir.
Así que intento concentrarme en cómo el agua fluye,
pero solo pienso que la dejo escapar,
justo como se me escapa la vida entre las manos.
En algún lugar árido no hay nada de lo que tengo aquí,
y aún así dejo el agua fluir.

Al menos hoy logré lavarme los dientes.

11.27.2017

Día #331: Un tren a la Felicidad


Me pregunto quién nos dijo que podíamos abordar este tren
¿Quién nos incitó a creer que podíamos alcanzarlo?
Como si no hubiese partido desde el inicio de los tiempos
En realidad, el tren a la Felicidad se marchó desde hace mucho
Nunca estuvo aquí o nunca existió
Fue tan solo una iusión creada para buscar, buscar,
Buscar por el resto de nuestra existencia el tren a la Felicidad
Una ilusión creada para hacernos olvidar que la vida es más que buscar
Quizá, si dejáramos de intentarlo alcanzar descrubriríamos
Descubriríamos que la Felicidad no es un lugar al que podamos llegar
La próxima vez, pregúntate, si la Felicidad debería tomar un tren a ti

11.26.2017

Día #330: Propósitos de fin de año y un cumpleaños atrasado

Hey, there!
Hace mucho que no tenía una de estas entradas con ustedes (si es que siguen por acá y no me encuentro absolutamente sola), de esas informales y directas que no hablan absolutamente de nada. AH, y que tampoco sea para hacer una lista de las razones por la que no he estado este blog. 

Es más, esta entrada es para decirles que mi meta de fin de año es escribir una entrada diaria. La mecánica será la misma ocupada por allá del 2011 y 2012. Escribir sobre la vida, las lecturas. compartirles alguna canción o video, poema, algo nuevo que haya descubierto, pensamientos, escritos... no sé. La meta es darle vida a El país de la palabra escrita durante lo que queda del año

Añoro con melancolía aquel tiempo de oro en que este blog tenía chispa y color, aunque yo hablara sobre muchas cosas depresivas y cosas por el estilo (don't worry que aun seguiré hablando de esas cosas), pero El país estaba habitado, así que era precioso. 

En fin, desde hace unos días he nombrado a las entradas como Día #xxx con la intención de ir acorde al número del día actual del año. Hoy es el día 330, así que nos ha tocado un entradica Off Topic. 

Sobre el cumpleaños atrasado. Me sorprende que este espacio haya cumplido siete añotes el pasado 7 de octubre del 2010. Sé que en realidad es más viejo porque antes fue un blog llamado Bloody Farewell, que iba sobre un fanfiction de Crepúsculo que escribí. Después eliminé todas las entradas, cambié el diseño y lo nombré Querido ángel de la muerte, para después volverse indefinidamente El país de la palabra escrita. Siete años ya de ir y venir, ¡felicidades al blog! Y muchas gracias a todos ustedes por ser parte de él, ya sea que comenzaran conmigo desde ese entonces o que apenas se hayan integrado. MUCHISIMAS GRACIAS EN VERDAD. 

Encontré entradas de cuando les hablaba sobre lo muy perdida que me sentía, sobre los miles de crushes que he tenido en la vida y el romance que tanto he anhelado vivir. Ugh, muchas cosas han cambiado y algunas otras siguen siendo bastante similares, así que leer todo eso y los comentarios me ha hecho sentir muy querida y asdfghjklñ

Así que espero poder seguir dando lata por acá durante muchos años más, y espero de todo corazón que ustedes puedan seguir conmigo. Mientras tanto, me despido derritiéndome de amor.

Con cariño siempre, Ana. 

11.25.2017

día #329: sacar las palabras como gotas de lluvia


Necesito sacar las palabras como gotas de lluvia que caen de las ramas de un tupido bosque, necesito sacarlas a través de mis dedos y del suave toque de las teclas. Así podré acumular un charco con forma, uno que refleje el cielo imperfecto; así podré compartir vida a quienes beban de ese charco.
Necesito sacar las palabras para que no me enfermen por dentro como las gotas pudrirían las ramas y matarían al bosque desde el mismo corazón de sus pinos.
Simplemente necesito sacar las palabras. 

11.24.2017

día #328: Who the fuck do you think you are?

credit to kenneth brandon


Dear future love,
WHO THE FUCK DO YOU THINK YOU ARE?
I HATE YOU.

I remember the exact moment I saw you for the first time
And I just knew I had to hate you.
I just knew that I was fucked up!
The ground crumbled underneath my feet like if it were made of jelly
And I fell so fucking hard for you.
So fucking hard! Like no one ever fell before.

I hate you because it took you only a second to break into me,
It took you a ‘Hello, it’s a pleasure to meet you’ to make me swung
I was, maybe, a little too into you in a very short period of time

I hate you because it took you another second to break my wall
The wall I built with so much dedication
Every day adding another stone to keep my heart safe
I kept it safe during years, so
HOW THE FUCK DO YOU THINK YOU ARE?
Give some answers now.

Do you have an idea of how much time I spent protecting myself?
I told you ´It’s my pleasure’ but what I truly meant was
‘Please, don’t say more, or it’ll be too late’.
I know some things aren’t meant to be,
I know not everything last forever,
So please don’t break this heart
Because it has been so long since someone took it with both hands
And swore to take care of it but instead crushed it with strength without even noticing

Dear future love, I’ve been there.
I gave my heart to someone who didn’t deserve it.
I gave my heart to some who didn’t love me.
I gave my heart to some who couldn’t stay.
That’s why I build a wall.
But love, love crumbled it down.
So tell, WHO THE FUCK DO YOU THINK YOU ARE?
I guess you are the love of my life.

11.23.2017

día #327: La incertidumbre


¿Sabes? Después de muchos años, aun sigo preguntándome cómo es la nieve;
cómo se siente desertar en un lugar frío, rodar por la nieve y hacer ángeles.
Soy una romántica empedernida que fantasea cosas como estas y que sufre al no poderlas tener.
No sé si las llegaré a tener.
Y eso es lo que duele, la incertidumbre.

11.22.2017

día #326: HOY NO ME QUIERO LEVANTAR


Hoy no me puedo levantar,
Y desafortunadamente no es un musical.
Hoy no me quiero levantar,
Tampoco quiero dormir,
Es más, ni siquiera respirar.

7.29.2017

aprende a decirle al mundo «jódete» de vez en cuando

Hey, guys!
Hoy vengo con algo muy distinto, les comparto un fragmento de la carta que Sol Lewiit envió a Eva Hesse en 1965.

"Aprende a decirle al mundo «jódete» de vez en cuando. Tienes todo el derecho. Simplemente deja de pensar, de preocuparte, de mirar por encima del hombro preguntándote, dudando, temiendo, doliendo, deseando alguna salida fácil, forcejeando, captando…¡Para ya y simplemente HAZ!
No te preocupes de lo ‘cool’, haz tu propio ‘no-cool’. Haz lo tuyo, tu propio mundo. Si sientes miedo, haz que trabaje para ti –dibuja y pinta tu miedo y tu ansiedad…
Tienes que practicar ser estúpida, tonta, no pensadora, vacía. Entonces podrás ¡HACER!
Intenta hacer algo de trabajo MALO – lo peor que se te ocurra y observa para ver qué pasa, pero sobre todo relájate y deja que todo se vaya al infierno – tú no eres responsable del mundo – tu sólo eres responsable de tu obra – así que HAZLO. Y no pienses que tu obra tiene que responder a forma, idea o sabor preconcebido alguno. Puede ser cualquier cosa que tú quieras que sea…
...Cuando trabajas o antes de trabajar tienes que vaciar tu mente y concentrarte en lo que estás haciendo. Después de hacer algo, ya está hecho y se acabó. Pasado un tiempo puedes ver que algunos son mejores que otros pero también puedes ver en qué dirección vas. Estoy seguro de que sabes todo eso. También debes saber que no tienes que justificar tu trabajo – ni siquiera contigo misma...”

Aquí tienen el video en el que descubrí esta carta que me ha calado tan bonito en el alma.
Versión Benedict Cumberbatch

Versión Andrew Scott

7.26.2017

Una carta a mi crush

Querido crush:

Si pudiera desprenderme de mis miedos y complejos, te invitaría a salir. Así, sin tanto rodeo, te diría que quiero conocerte. No te asustes: no voy a acosarte ni nada por el estilo. Esta carta es simplemente una combinación de 27 letras, signos de puntuación, pensamientos y mucha ansiedad. No espero que esto trascienda. Si no quieres volver a dirigirme la palabra porque te sientes incómodo conmigo, lo entenderé. No tienes la obligación de responder ni de terminar esta carta.

Vamos aclarando algo: No puedo decir que estoy enamorada de ti, porque eso sería una gigantesca mentira. Estoy enamorada de la idea que me hice de ti, así que eso me dirige a las expectativas. Y según el libro que me has prestado, las expectativas podrían no ser muy buenas. Especialmente cuando no quieres aceptar la realidad. Así que ya estoy jodida.

Si pudiera hablarte, frente a frente, te diría que la atracción que siento por ti no es algo que surgiera a primera vista. De hecho, yo ni siquiera te había identificado. Eras un estudiante, solo un estudiante, no tú. Pero entonces, comenzaste a saludarme a mitad de los pasillos aunque no tenía que hacerlo. Lo hiciste una y otra vez, hasta que llegó el momento en el que, cuando no estabas, te buscaba. Quería saber tu nombre. Y honestamente no recuerdo cómo lo averigüé. Quería hablar contigo. Conocerte. Parecías un buen chico. Me resultabas lindo.

Y un día, no sé cómo, no recuerdo qué estaba haciendo, te vi en el pasillo. Y me presenté incómodamente, haciéndolo todo demasiado formal y minutos después quise meterme en una madriguera y no salir en unas cuantas horas. Verás, creo que podría tener ansiedad social. Por lo tanto, cuando siento que hago el ridículo, pienso que me recordarás siempre de la misma forma. Así que pensé que pensarías: “Qué chica tan más rara.” Pero no debería estar poniendo pensamientos en tu mente porque no sé si realmente estuvieron allí. Ahg, en fin… Así fue como fingí que no conocía tu nombre y te di la versión corta de mi nombre y no el nombre completo.

Después, mientras hacía mi trabajo, te buscaba con la mirada, pero no lograba mantener una conversación decente contigo. Una vez te vi leyendo, atrás del edificio, donde el monte crece tan alto que si lo ves desde abajo, parece que las hojas alcanzan las nubes y podrían pincharlas con sus puntitas y desinflarlas. Y pensé que era genial que leyeras porque a mí también me encanta leer y, quizá es algo tonto, pero a veces siento como si los libros me recomendaran a las personas. Y sentí eso, así que pensé en que tenía que encontrar la forma de hablar contigo, de encontrar un punto en común, Pero el tiempo pasó y solo eras una ilusión. Aun lo eres, en parte.

En fin, quiero conocerte. No por la idea que me hice de ti o porque me hayas atraído desde hace mucho tiempo, sino porque me gustó la forma en la que conversamos la otra vez. Hablamos de muchos temas en tan poco tiempo, que sentí que nuestra conversación había sido apurada y aun así, tenía médula. Me gustó el hecho de que dijeras lo siguiente -y aun puedo escuchar el tono de tu voz diciéndolo-: “Por eso tengo los libros.” Y antes, habías preguntado: “¿Por qué no sales?” Y te dije que era porque casi no tenía tiempo, pero la verdad es que, la mayoría de las personas no me parecen muy interesantes al conversar. Sin embargo, sí me resultan interesantes cuando las intento analizar, cuando intento quitarles sus capas, saber por qué son como son.

Paso mucho tiempo pensando porque soy introvertida. Me gusta estar en casa, ya sea leyendo, escribiendo, dibujando, viendo alguna serie o alguna película, o simplemente pensando o viendo hacia el techo, u observando a un gato, o cosas así. Mi vida introvertida es el lugar más cómodo que puedo tener y, cuando alguien que no me es interesante abre la puerta para entrar, implica una invasión hacia esa comodidad. Y no me gusta.

La diferencia más grande es que, cuando una persona interesante entra a mi mundo, dejo las puertas abiertas. Lo llamo, lo busco, le escribo cartas, me intereso por ella, lo amo. Amo, genuinamente, a mis amigos, incluso cuando no siempre estoy de acuerdo con ellos. Eso ocurre porque los conozco tanto como ellos me conocen a mí, porque te puedes presentar frágil ante ellos y sabes que jamás te herirían, y viceversa.

Déjame ponértelo así, resumido en unas cuantas palabras: Quiero salir contigo para ver si puedes entrar a mi vida introvertida, como un amigo. Y si esa amistad llega a trascender, bueno, supongo que descubriremos qué podemos hacer. Así, querido crush, ¿quieres salir conmigo?

Con amor, A.

7.14.2017

Di "sí" más seguido sin perderte a ti misma

Son las 22:17 horas cuando comienzo a escribir esta entrada. Acabo de tomar unas fotografías de la antes agenda, ahora diario, del que les hablaré hoy. Mírenlo, observenlo. Contiene una parte de mí.

Desde pequeña quise llevar un diario donde poner mis sentimientos y pensamientos. Lo hice cuando tenía unos trece años, le confesé a las páginas lo mucho que me gustaba "Bebo", y lo hice de la forma más bonita con la que se puede iniciar uno de esos textos: Querido diario. Por supuesto, el diario, que realmente estaba en las páginas finales de una libreta de alguna clase, fue descubierto. El drama inundó nuestro hogar porque Anahlí estaba poniéndole más atención a un chiquillo que a las cosas que verdaderamente importaban aka la escuela. Bebo dejó de gustarme y los diarios se convirtieron en algo que yo no podría tener porque, al fin y al cabo, sospechaba que siempre encontrarían la forma de meterse en mis cosas y descubrir mis secretos.

Afortunadamente los años pasaron y me pude hacer con una habitación para mí sola. Ahora, mi espacio personal se respeta y lo único que se mueve mientras no estoy son los libros en sus estanterías. Ahora me siento bien para llevar un diario y poder hablar de cómo me siento verdaderamente, de lo que me gusta y me enoja, de lo que odio y lo que idolatro, de los sueños y decepciones, etc. Anteriormente ya hablaba de mis sentimientos aquí en blogger, ya sea a través de cartas o escritillos (aún pueden leerlos si dan clic en las etiquetas que está a lado). Me asusenté muchísimo en estos últimos años porque parece que mi cerebro es capaz de producir ideas y yo son totalmente incapaz de tener la disciplina y fortaleza para desarrollar esas ideas. 

Escribir un diario probablemente me ayude mucho a conocerme más a mí misma, a aceptar errores y ver el mundo desde otra perspectiva. Lo he estado escribiendo en inglés, así que eso también me ayudará un montonal porque aunque me gusta mucho el idioma y lo enseño, no suelo escribir muchos textos en el idioma. Y si los comparto con ustedes, me ayudará a mejorar el blog y espero, me ayude a desarrollar nuevamente mi estilo de escritura. 

6.08.2017

A philophobic in love

Este es mi primer poema en inglés así que estoy muriéndome de cansancio y emoción
Sometimes I wonder what kind of person I am
To love you in this way when I know it’s not right
I’m not going to lie I love the way your fingers don’t fit perfectly with mine
Your hand’s palm is so big and your fingers so long
That I have to spread mine so wide it hurts
But I’m in love with the way we walk while we talk
And to be honest, I love you because you are the love of my life
So I laugh until cry and cry until I find the way to smile

Sometimes I wonder what kind of person I am
If I want to believe everything’s gonna be alright
Because deep down my soul I know everything is wrong
You can't be happy with someone who you don't belong
I'm masochistic, dreamer and realistic at the same time
I like to daydream that someday you'll see me with other eyes
So I hold onto a fragile lie knowing I will crumble down
I'm not going to lie, I love you because you will never be mine

Sometimes I wonder what kind of person  I was
To run at the smallest chance and not giving a damn
It's the truth I never wanted anyone so I left with no regrets
But even though I want you and I love you I can't stay
Love is a sick feeling that will end up killing me
I won't risk my heart so today I say goodbye
This pain, It's worth it because you are the best thing that has ever happened in my life.
I wonder what kind of person I am to leave you when I know either way I'll die

5.26.2017

Necesitamos hablar sobre el blog

(...)

Hace un año, escribí una entrada similar a esta, prometiendo volver y esas cosas. ¿Adivinan qué ocurrió? Que me aparecí ocasionalmente y me dejé llevar por la vagancia. Espero que en esta ocasión no pase lo mismo y ponerme ya al tiro porque son casi dos años de inactividad en mis escritos. De hecho, no sé cómo antes tenía tantas ideas y escribía tantas cosas de romance si no estaba enamorada de nadie en específico. Ahora tampoco lo estoy, pero mi creatividad está un poco muerta. Creo que recurriré a la vieja confiable de los prompts en tumblr o pinterest con tal de seguir escribiendo. 

Otra cosa de lo que hay que hablar es el diseño del blog: mantenía tonos a color lavanda y azules, pero esta vez me declino por los grises y verdes bajitos. Quise volver a lo básico, a la simpleza de como lo tenía antes. Así que ta dá, el nuevo diseño del blog. No me resistí a dejar la fotica de Benedict Cumberbatch en Third Star (si no han visto esa peli vayan a verla, en serio). 

Y ahora, ¿qué hay de nuevo en mi vida?
  • Obtuve un ascenso en el trabajo. Es mi bendición y mi maldición, porque no me he estado sintiendo del todo feliz y satisfecha desde que lo obtuve el pasado 1 de Septiembre; sin embargo, sigo avanzando poquito a poquito, a ver qué sale. Solo espero que mi salud mental no se vea demasiado afectada, ¿pero a quién engaño? Está muy mal.
  • Escribí un fanfiction en Wattpad y aunque no es súper popular, obtuvo varias lecturas y la interacción con mis lectores me hizo y hace muy feliz.
  • Rescatamos a un gatito con una discapacidad. He hablado de Dominó en el blog literario, pero no aquí. A veces subo historias en instagram sobre él ;)
  • Tuve mi primera capacitación fuera de la ciudad por trabajo y estaba muriéndome de nervios  por tener que tomar el autobús, pedir una reservación y llegar a la habitación, conocer a mis compañeros de otros campus y esas cosas, pero sobreviví.
  • Tengo veinticinco ahora.
  • Comencé a salir a correr en las mañanas, pero como hay mucha delincuencia en mi ciudad, mis papás, hermanas y vecinos comenzaron a decirme que no debo ir tan de madrugada porque es muy peligroso para mi andar sola a las 6:00 a,m. Así que dejé de ir, aunque muero por volverlo a hacer porque realmente me hacía sentir muy bien. Me gusta hacerlo en la mañana porque me despierta y me siento muy poderosa y segura; además, me gusta esa hora porque todo está oscuro y nadie me ve haciendo el oso. Si lo hiciera en la tarde, todos me verían y el solo pensarlo me da mucha ansiedad.
  • SIGO TENIENDO ANSIEDAD SOCIAL. 
  • Ahora trabajo con el método bullet journal así que pronto vendré a presumir mi agendita.
De momento no se me ocurre nada más qué añadir, pero si recuerdo algo importante volveré. 

Espero que me sigan acompañando por este pequeño espacio. 
¡Un abrazo!


1.31.2017

Lo que dijimos entre dientes


Reíste cuando dijeron que tenías gustos raros. Me habría gustado tomar la palabra "raro" como algo bueno, pero mi mente insegura solo hizo mandarme señales rojas, señales que quedaron marcadas al rojo vivo en mi pensamiento, en mi piel. ¿Por qué no les dijiste que no era raro, sino deferentes? ¿Por qué no les dijiste que me preferías a mí sobre todas las demás? ¿Por qué no les dijiste que, en el momento en que sentiste interés en mí, pensaste que era única?
Cuando te despediste en mi puerta, sonreíste y me besaste como si nada hubiese ocurrido.
—Te quiero —murmuraste en cada beso. Me quedé muda. Me miraste esperando alguna señal de que diría las palabras que necesitabas escuchar.
—Adiós —te di un último beso y cerré la puerta de casa para no verte más esa noche. Me había lastimado que no aclararas que raro estaba bien, porque yo necesitaba saber que raro está bien cuando se trata de mí; yo lo necesitaba tanto como tú escuchar esas palabras. —Y yo a ti —pero ya no estabas.
No lo supiste. No supiste que ya era muy tarde, que ya podías destruirme si lo querías.


1.30.2017

Lo que dijimos en la madrugada

—La madrugada huele —desde pequeña lo creía, lo sentía en los orificios de la nariz, ese olor indescriptible a nuevo, alejado de la rutina, inundando mis pulmones; olor a madrugada y a aventura.
Lo había repetido en muchas ocasiones pero hasta ahora, hasta ese momento, solo había recibido miradas extrañas como respuesta. No sé por qué lo dije, quizá es que te tenía confianza.
—Sí... A madrugada. También huele a silencio.
Yo jamás había sentido el olor a silencio, debo confesar.
—¿A silencio? —no podía responder como me habían respondido muchas veces, porque sabía lo difícil que es tratar de explicar algo cuando no encuentras las palabras para describirlo.
—Sí, al olor a madrugada generalmente lo acompañan el olor a silencio y quietud.
Quizá el olor a silencio era esa sensación de paz que llegaba cuando respirábamos aquel aire limpio de los olores del día. Asentí.
Tú sonreíste, como si hubiésemos emprendido un viaje de esos que la gente presume en sus fotografías. Lo cierto es que emprendimos un viaje que no se podía describir con palabras, como el olor a madrugada y silencio.


1.29.2017

Doce cartas de amor


{ disponible en @sttorybox }
Querido Rommel: te quise desde los siete hasta los doce.
Querido Marco: gracias por tener la sonrisa más linda. Te besé mentalmente cientos de veces.
Querido Alejandro: Lamento que no pudieses verme como realmente era.
Querido Eloy: Siempre creí que eras lindo. Nunca te lo dije.
Querido Omar: Cuando me preguntabas si quería ser tu novia, creía que jugabas. A veces pienso si lo decías de verdad.
Querido Mike: Nunca tuviste ojos para mí. Yo era de una liga muy baja.
Querido Diego: Me veías, pero supongo que no era tu tipo.
Querido Rommel: A veces aún pienso en ti.
Querido Eder: Me arrepiento mucho de no haberte dicho nada. Mucho. Eras gracioso, divertido, guapo, de muy buen humor... Eras perfecto.
Querido David: Siempre me sonreíste en los pasillos, nada más.
Querido Luigi: Olvido las palabras cuando te veo. Olvido cómo decirte hola, pero siempre sonrío.
Querido amor: Lamento nunca haber tenido el valor para hacerte frente. A veces me pregunto: ¿Y si...? A veces recapitulo todos los nombres, pero no importa. El pasado jamás cambia. Solo cambia lo que decidimos recordar.